Servicio de Atención Gerontológica Centrada en la Persona (ACP/AGCP)

¿QUÉ ES LA ACP/AGCP?

La atención centrada en la persona es  un  modelo de atención cuyo objetivo es  mejorar la calidad de vida de las personas mayores en situación de fragilidad o dependencia, situando a la persona  el centro de la acción.

Este modelo  aporta  un conjunto de técnicas e instrumentos que facilitan la intervención personalizada y orientada a la persona.

Aplicar la atención centrada a la persona implica reconocer a cada persona en su individualidad y fijar la mirada en sus capacidades frente a aquello que la hace dependiente, apoyando su autodeterminación.

Estamos hablando de un cambio de perspectiva donde no son las personas las que se adaptan al centro o a los servicios, sino que son éstos los que se adaptan a la singularidad de la persona

¿A QUIÉNES DIRIGIMOS ESTE SERVICIO? ¿QUIÉNES PUEDEN DISFRUTAR DE ESTE SERVICIO?

Este modelo de atención está al alcance de cualquier centro o servicio que atienda a personas dependientes o en situación de fragilidad y que quiera trabajar por mejorar la atención que prestan.

Desde Sercoval ofrecemos la posibilidad de realizar este camino de la mano de profesionales que acompañará al equipo en todo el proceso.

¿CÓMO SE HACE  LA ACP/AGCP?

La ACP/AGCP consiste en las siguientes fases:

• 1ª Fase: Sensibilizar, informar y formar a la propia organización. Para introducir un cambio de modelo de actuación es necesaria una implicación de todos los miembros del equipo de trabajo, por eso antes de iniciar cualquier acción debe haber un trabajo conjunto para conocer qué es lo que queremos hacer, como la vamos a hacer y hacia donde queremos ir. En esta fase es muy importante la formación en ACP de todo el equipo
• 2ª FASE: Lograr un liderazgo del cambio interno y compartido. Crear un equipo promotor del cambio, analizar de manera conjunta las fortalezas y debilidades que tenemos como equipo, analizar el clima laboral… entre otras cosas nos ayudará a internalizar el proyecto que queremos para nuestro centro o servicio.
• 3ª FASE. Evaluar y revisar nuestra práctica cotidiana. Revisar los procesos de cada centro o servicio y chequearlos con descriptores de buena praxis definidos desde el modelo de atención ACP, permite situar la práctica actual de nuestro centro o servicio en relación a los criterios de buena praxis propuestos desde la ACP, identificando así tanto las fortalezas o buenas prácticas que ya llevábamos a cabo, como las áreas de mejora pendientes de trabajar.
• 4ª FASE. Diseñar un plan de mejora. Desde la buena praxis de la ACP y los resultados obtenidos en la 3ª Fase, el grupo promotor del cambio, diseña un decálogo de cada uno de estos procesos o momentos. A partir de las distancias  detectadas entre lo que se hace y la buena praxis desde la ACP reflejada en cada decálogo,  se diseña un plan de mejora donde se seleccionan los cambios a realizar y se programan de forma temporalizada, para que estos se puedan realizar a un ritmo asumible y se vayan consolidando.
• 5ª FASE. Implantación del modelo. En esta fase se va evidenciando el cambio en el día. El desarrollo del Plan de mejora con la incorporación de los instrumentos de registro propios del modelo ACP, activar figuras profesionales  como el profesional de referencia, hace de esta fase un momento de gran actividad y de  hacer efectivos los cambios que se han ido trabajando.
• 6ª FASE: Evaluar y seguir avanzando. La ACP nos ofrece instrumentos ya elaborados para la Revisión participativa. Los puntos a evaluar de manera periódica son:  la  evaluación del seguimiento, la identificación y puesta en valor de los logros, el establecimiento de  nuevas medidas de cambio y actuaciones para la consolidación de los logros  y el desarrollo de acciones para fomentar la creatividad y un clima de continuo progreso.

La incorporación de indicadores durante todo el proceso nos ayudarán a evidenciar y cuantificar nuestros progresos y los puntos sobre los que incidir.

¿QUE OFRECEMOS?

SERCOVAL pone a tu servicio un equipo de profesionales y de herramientas que pueden hacer posible la implantación del Modelo ACP en tu centro o servicio.

A través de un cuidado proceso de formación y acompañamiento, asesoramos y colaboramos con los equipos profesionales para transformar tu modelo de gestión en un modelo centrado en la persona.